El juego Candy Crush hizo furor en los últimos meses. La empresa que lo creó, King, está por salir a cotizar en Bolsa. Fue valuada en cinco mil millones de dólares y tiene una facturación de 480 millones de dólares en lo que va de 2013.

Por Continental, la psicóloga especializada en trastornos de ansiedad Cecilia Palozzo, señaló que el juego “genera ansiedad por la misma mecánica del juego y por una serie de ingredientes nuevos que lo hacen diferente del Tetris. Por su mecanismo de no dejar nada que falte concluir un nivel, una vida, si tengo tres vidas tengo que usar las tres para alcanzar el máximo nivel posible en el tiempo limitado que tengo. Y por otro lado el hecho de que sea un hecho social que se juega a través de las redes. El otro necesita de mí, yo necesito del otro, la competencia que genera ver un tablero con todos mis amigos conectados en Facebook”, puntualizó en La Mañana.

“Todo eso genera ansiedad por una especie de círculo vicioso: yo desfocalizo mi atención de lo que a mí generalmente me preocupa; ansiedad del trabajo, del estudio, preocupaciones en general. La ansiedad sube naturalmente porque yo necesito concluir con algo. Cuando empiezo a jugar, la ansiedad me baja, me empiezo a olvidar de todo y a medida que voy pasando niveles me va subiendo la ansiedad”, resumió la especialista.

“Los colores, la música, son muy atractivos y por otro lado ser un juego social y estar en cualquier dispositivo a cualquier hora del día” son los principales cebos, describió Palozzo.